Al llegar al camping, procuraremos dejar el coche y la caravana a la entrada, sin que estorbe a otros vehículos, nos dirigiremos a recepción y después buscaremos una parcela que nos guste, es preferible primero ir andando, para poder observarlas mejor y para hacernos cargo un poco del recorrido que tenemos que hacer hasta la parcela que hayamos elegido, si es que nos dejan. La elección de un «buen sitio» siempre es totalmente personal.
Para nivelar la caravana se suelen utilizar varios sistemas, uno de ellos, el más técnico, es procurarse un nivel de burbuja, los hay muy pequeños y económicos, y al colocarlo en la lanza, tanto en posición transversal como en paralelo a la caravana, sabremos de qué lado está más o menos inclinada y podremos subir o bajar las patas según sea necesario.
No olvide colocar un depósito para las aguas residuales, llamadas también grises, para evitar la contaminación del terreno y además que no se inunde la parcela o la del vecino. Hay depósitos que llevan ruedas y de esa manera facilita su transporte hasta el desagüe más cercano.
